El Parlamento Europeo ha aprobado la norma Euro 7. A partir de 2025 tendrán que cumplirla los vehículos ligeros y desde 2027 los pesados. Se incluye en esta norma la jocosamente llamada “excepción Ferrari” por la que fabricantes pequeños no tienen que cumplirla hasta 2030 en el caso de ligeros y 2031 los pesados.
Euro 7 es una ampliación de Euro 6 a la que se añade el control de los óxidos de nitrógeno y la longevidad, que afecta a la huella de carbono en toda la vida útil del vehículo. Pero sobre todo regula otros parámetros ajenos al motor como las partículas que se desprenden del sistema de frenado y de los neumáticos, que veremos como acaban afectando a la seguridad vial.
Por primera vez, además, se aplica a los vehículos eléctricos para regularizar la duración de sus muy contaminantes y todavía no reciclables baterías.